domingo, 30 de enero de 2011

Qué funk soy y qué moderna!

¡Madre mía! Exclamé.
Cada vez son más los jóvenes que van en busca de su personalidad, y si no es la suya, la de otro cualquiera vale. Esto ha sido una realidad durante décadas y nuestra generación no va a ser menos. Cuántos falsos hippies hubo, cuántos falsos seguidores de "la movida" cuántos y cuántos falsos estilos embutidos en gente sin personalidad.
Ahora es el turno de los "modernos". Un verdadero moderno tiene que sentir asco al ver lo que hay a su alrededor. Gafitas de pasta negra (y de mucha pasta también), pelo siguiendo el último grito, estilo de vestir entre guay y megaguay.... ya sabéis a lo que me refiero. Hablo de todas esas niñas y niños (niñatas y niñatos más bien) que se han vuelto modernos porque es un rollo...no sé....en plan....tú ya me entiendes. Gente sin personalidad (me encanta recalcarlo) que cambia constantemente.
El "moderno de imitación" es fácilmente reconocible, sólo hay que explorar el pasado y ésta suele ser la "digievolución" que siguen: Estilo choni/cani - amago de pijo - raperillos - amago de pijo otra vez pero con un estilo mucho más inditex - y por último, moderno, por supuesto esta NO es la última etapa.
Sacad vuestras bonitas gafas que no os sirven para nada y mirad en un espejo, reflexionad en lo que estáis viendo....
¡Madre mía! Exclamé en la calle al descubrir la cantidad de gente que carece de personalidad y estilo.

lunes, 24 de enero de 2011

Sensaciones

Una vez que has saltado al abismo eres capaz de volar. Durante unos segundos en los que eres consciente de que la realidad es otra. En ese tiempo se extiende ante tí toda la naturaleza. Árboles, pájaros, flores, agua, roca, viento, todo.
Sólo la gente que se arriesga obtiene estos resultados. Sólo unos pocos valientes darán respuesta a esas preguntas que nos han atormentado a lo largo de los años. Pero se las llevaran con ellos porque no seríamos capaces de entenderlo.
Los que arriesgan se equivocan, y también obtienen placer de ello. Porque aprenden de sus errores y sacan siempre el lado positivo. Porque hay mayor logro en haberse arriesgado.
Es gente que todo lo puede, no hay meta para ellos, ni bache que los detenga. No hay tristeza que les borre una sonrisa ni frío que les congele un abrazo.
Yo admiro a esta gente. Y en parte también me he arriesgado en muchas cosas. Quizás mi salto no haya sido tan grande, ni tan significativo. Puede que sea vulnerable y que los errores me afecten. Pero una cosa quiero decir, nunca pienso quedarme parada en la línea de salida porque los sueños, las metas y todo lo que significa sentirse realizado son cosas que están siempre al otro lado.

domingo, 16 de enero de 2011

50%

Ha llegado la hora. Mañana empiezo la dura prueba de los exámenes. Muchos os reireis, porque ya sois expertos en esta batalla. Otros, como yo, estáis temblando ante vuestros primeros exámenes como universitarios.
Llamadme "paranoyas", pero para mí es mucho más que un aprobado, o un suspendo. Me ha llevado a plantearme muchas cosas. ¿Y si no valgo para esto? ¿Y si, como dijo Castelao, debería dejar la medicina por amor a la humanidad? ¿Y si tengo que abandonar esta vocación que cada día se hace más fuerte?
No quiero abandonar, pero tampoco quiero pasar años y años perdiendo el tiempo luchando por algo en lo que no puedo aportar nada.
50% ése es el porcentaje. 50% define mi vida en estos momentos. Tan sólo un porcentaje definirá mi vida de los próximos años. Aprobado o Suspenso. Siento que lo necesito, aprobar tan sólo una asignatura aunque sea....aterrizar por fin en la carrera y verme capaz. Converitirme, de una vez por todas, en un proyecto de Médico.